miércoles, 22 de febrero de 2012

LOS MOVIMIENTOS ARTÍSTICOS DEL SIGLO XIX

EL ROMANTICISMO EN EUROPA.
Es un movimiento que podemos relacionar con las revoluciones liberales y nacionalistas de 1820, 1830 y 1848. Sus características son:


1. Los pintores son impulsivos,  exaltan la libertad y el progreso humano.
 2. Vuelven la vista hacia la Edad Media para buscar los orígenes de sus naciones. El folklore nacional (trajes típicos regionales, costumbres) también es su fuente de inspiración.
3. Les atraen los mundos  exóticos, como el mundo árabe, países europeos lejanos.
4. Pintan acontecimientos históricos o sucedidos en su época (acontecimientos revolucionarios, preferentemente).
5.  Sus pinturas reflejan sentimientos fuertes, amor, pasión, lucha,  desesperación.
6. En sus cuadros hay mucho movimiento, desorden, tensión. 
7. Son pintores fundamentalmente coloristas, colores brillantes, potentes. 
DELACROIX, pintor francés que destaca por su LIBERTAD GUIANDO AL PUEBLO, trata sobre la revolución de 1830 en París, cuando se acabó definitivamente con el absolutismo. Otro cuadro es LA MATANZA DE QUÍOS (1824) acontecimiento relativo a la lucha por la independencia del pueblo griego.  Aplica a estos cuadros algunas de las características anteriormente citadas. Buscar algunos cuadros más en los que se pueda comprobar la característica 3. 
 
Libertad guiando al pueblo.
El lienzo representa una escena del 28 de julio de 1830 en la que el pueblo de París levantó barricadas. El rey Carlos X de Francia había suprimido el parlamento por decreto y tenía la intención de restringir la libertad de prensa. Lales. Delacroix representa a la Libertad como guía que conduce al pueblo. Tampoco está representada de una forma abstracta, sino que es una figura alegórica muy sensual y real. El pueblo es la unión de clases: se representa al burgués con su sombrero de copa y empuñando el fusil, al lado un andrajoso y un herido que pide clemencia a Francia. Al fondo aparecen brumas y humos de la batalla que diluyen un barrio francés bastante realista. A los pies de la Libertad un moribundo la mira fijamente indicándonos que ha valido la pena morir por ella. El tema de la obra es la insurrección burguesa que tuvo lugar los días 27, 28 y 29 de julio de 1830. Es una de las revoluciones burguesas, y más concretamente la que puso fin al terror blanco tras los dieciséis años de la restaurada la monarquía borbónica, encarnada en el ultraconservador de Carlos X, que fue expulsado del trono y sustituido por Luis Felipe de Orleans, el llamado Rey burgués, con lo que se consumó el acceso al poder de la burguesía liberal, aunque no se instauró la república. Delacroix estuvo del lado de los revolucionarios, es más, él mismo se ha representado en el cuadro como el hombre que lleva el sombrero de copa negro y que se encuentra entre los combatientes y en primera fila.

La matanza de Quíos (1824).
 Es un cuadro de Eugène Delacroix, conservado en el Museo del Louvre de París, Francia. Este cuadro representa un episodio de la guerra de independencia de los griegos contra los otomanos ocurrido ese mismo año: la matanza de 20.000 habitantes de las islas griegas, y el sometimiento a la esclavitud de las mujeres y los niños supervivientes. 
Estas pinceladas borrosas fortalecen la impresión de desolación que el cuadro transmite.
El resultado es este cuadro prácticamente monocromo, con unas tonalidades cobrizas que unifican el espacio y proporcionan al cuadro una luz infernal. El cuadro se compone de tres pirámides humanas. De izquierda a derecha, se ven expresiones de miedo y desesperación. Los cuerpos, semidesnudos y tirados, reflejan la derrota de los griegos.
A la izquierda hay una pareja moribunda. Puede verse la sangre que recorre el cuerpo del hombre. En primer plano, a la derecha, se encuentra la figura de una mujer vieja, que mira hacia afuera del lienzo con expresión de horror. Su presencia refuerza el patetismo de la escena.
Detrás de ella, a la derecha, se ve a un oficial turco llevándose a una mujer desnuda, lo que enfatiza la crueldad de la masacre.
Destaca en el lienzo la ausencia de un héroe. La masa de los habitantes son los protagonistas, los que resultan heroicos, sufriendo todos ellos la guerra.

Los dos cuadros anteriores cumplen todas las características, excepto la 3, que la cumple el cuadro que tenemos a conticnuación:

Árabes jugando al ajedrez.
GéRICAULT,   pintor francés, autor de LA BALSA DE LA MEDUSA, (Completad información sobre el tema del cuadro y explicar en qué sentido es romántico, qué características de las seis se le pueden aplicar). Añadir tres cuadros más de este autor.

La Balsa de la Medusa.

 Representa un momento de las consecuencias del naufragio de la fragata de la marina francesa Méduse, que encalló frente a la costa de Mauritania el 5 de julio de 1816. Por lo menos 147 personas quedaron a la deriva en una balsa construida apresuradamente, y todas ellas excepto 15 murieron durante los 13 días que tardaron en ser rescatadas, y las que sobrevivieron soportaron el hambre, la deshidratación, el canibalismo y la locura. El evento llegó a ser un escándalo internacional, en parte porque sus causas fueron atribuidas a la incompetencia del capitán francés actuando bajo la autoridad de la reciente y restaurada Monarquía francesa.
Al seleccionar esa tragedia como el tema de su primer trabajo importante —una descripción (la cual no le fue encargada) de un evento reciente en esa época— Géricault conscientemente seleccionó un incidente muy conocido que pudiera generar un gran interés público y al mismo tiempo que pudiera ayudarlo a comenzar su carrera.
Es romántico ya que es un acontecimiento histórico, reflejan unos sentimientos muy fuertes citados anteriormente en el tema del cuadro y hay mucho desorden y tensión reflejados.
Tres cuadros más de GéRICAULT:
Derbi en Epsom.
Representa la carrera o derbi de Epsom, que está considerado aún hoy en día como una de las más prestigiosas carreras de caballos del mundo. Tiene lugar esta carrera todos los años, en el primer fin de semana de junio en el hipódromo de Epsom Downs, Surrey, Inglaterra. Este derbi está documentado por primera vez en en año 1661. Se originó como una celebración después de la primera carrera de los Epsom Oaks en 1779. Edward Smith-Stanley, 12. Conde de Derby (cuyo caballo Bridget había ganado la carrera) y Sir Charles Bunbury echaron una moneda al aire y acordaron que la carrera llevaría el nombre de quien lo ganara. En una ocasión, Géricault estaba viendo una carrera cuando cayó una fuerte tormenta, y ese ambiente eléctrico y tormentoso es lo que ha querido reflejar aquí.
Esta obra tuvo una notable influencia en los impresionistas. Toda la atención se fija en los caballos, mientras que las franjas superior (el cielo) e inferior (la hierba) son meras manchas de color que pasan rápidamente, intensificando de esta manera la sensación de velocidad.
Llama la atención por su falta de realismo. En efecto, los caballos parecen flotar en el aire. Como si se tratara de una danza estilizada, los caballos son todos representados en el tiempo de suspensión de su galope.
Por el contrario, y eso se ha descubierto posteriormente a la fecha de este cuadro, y gracias a las fotografías, los caballos no tienen jamás al mismo tiempo las cuatro patas tensas. Por este detalle se dice que no es un cuadro realista, a pesar del meticuloso cuidado que prestó Géricault al dibujo.
Utiliza Géricault colores fuertes. El intenso verde de la hierba brilla fantasmagórico, contrastando con la penumbra del cielo cargado de tormenta.
El cleptómano.
Pertenece a la serie de diez retratos de alienados internados en el manicomio parisino de Salpêtrière, que realizó Géricault al final de su carrera. Se trataría de modelos clínicos representativos cada uno de una enfermedad, y lo realizó a instancias del prestigioso psiquiatra Étienne-Jean Georget, uno de los fundadores de la psiquiatría social. Georget consideraba que la demencia era una enfermedad moderna, que dependía en gran parte del progreso social en los países industrializados. Consideraba que los locos eran enfermos mentales que precisaban ayuda. En lugar de llevar a los sujetos a clase para que los estudiantes puedan examinar sus características físicas, el profesor encargó a Géricault que pintase estos modelos representativos de distintos tipos de locura. El Dr. Georget apreciaba mucho la objetividad en esta serie de obras que establecía una unión entre el arte romántico y la ciencia empírica.
Géricault procura obtener en sus retratos un realismo científico. Se trata de un trabajo rápido, que prefigura las preocupaciones de los impresionistas. Se está no obstante lejos del impresionismo. Se trata más bien de realismo científico.
La fábrica de cal.
Se representa una fábrica de cal, en la que Géricault había invertido dinero, y que esbozó en una primera visita, sobre el terreno. Aquí representa a tres caballos vigorosos, aún con los arreos, que están comienzo de los morrales que llevan al cuello. Delante de ellos, ocupando la mitad derecha del primer plano, el terreno embarrado de la fábrica. Detrás puede verse el edificio, en el que están entrando otros dos caballos. De la fábrica sale, por la parte izquierda, un intenso humo blanco, que revela la realización de actividades en su interior. Esas nubes de humo blanco contrastan con el cielo sombrío.
CASPAR DAVID FRIEDRICH, (Alemania) elegid tres o más cuadros de sus misteriosos paisajes.

Acantilados blancos en Rügen.
Esta obra de arte está creada teniendo en cuenta las convenciones tanto románticas como del paisaje. En este sentido, no se diferencia de otras obras de Friedrich; parecía sentirse bastante atraído con la idea de ver y experimentar la naturaleza en lugares aislados y maravillosos: al borde del mar o de lagos, en la cima de las montañas, o en lo alto de una cascada.
El caminante sobre el mar de nubes.
La obra representa a un viajero, al que se ha identificado con el propio Friedrich, que se encuentra de pie en lo alto de una montaña elevada, mirando un mar de nubes que queda debajo. El viajero se encuentra de espaldas. Viste de negro. Adelanta una pierna y se apoya en un bastón. Se pueden ver los picos de otras montañas saliendo entre la niebla, mientras que una cadena de enormes montañas ocupa el fondo. Se trata de un paisaje de la Suiza de Sajonia. Esta pintura también fue utilizada como carátula del libro "El Conde de Montecristo" del escritor francés Alexandre Dumas (padre).
El soñador (Las ruinas de Oybin).
Realizado cinco años antes de su muerte, el cuadro representa a un personaje solitario en medio de las ruinas del Monasterio de Oybin, símbolo de lo perecedero y transitorio. Friedrich logra trasmitir gran misticismo por medio de una luz propia del crepúsculo que inunda todo el lienzo.
La obra parece reflejar el espíritu de soledad y melancolía que debió embargar al autor ante la proximidad de su propia muerte.

Arco iris en un paisaje de montañas.
Este cuadro está inspirado por sus viajes a través de Alemania y por las orillas del mar Báltico en 1809.
En este cuadro se ve, en el primer plano, a un caminante que se ha detenido a descansar. Mira más allá, donde se abre bruscamente un negro abismo de profundidades inconmensurables. Al fondo se vislumbran unas montañas. Por encima del paisaje, un arco iris formado por la luz menguante.
TURNER (Gran Bretaña). 3 cuadros (o más).
La mañana después del Diluvio.

 El salto del Rhin en Schaffhausen.
Pescador saludando a un barco mercante.
DE TODOS LOS CUADROS ROMÁNTICOS, ELEGID UNO O DOS QUE MÁS OS GUSTEN Y COMENTADLOS.
Acantilados blancos en Rügen.
Es una obra de Friedrich, que me gusta porque resalta un ambiente relajante de la naturaleza, donde se encuentra el mar, los árboles, etc.
La matanza de Quíos.
Este es el cuadro que menos me gusta, de Delacroix, ya que refleja la desesperación convertida en combate y con unas consecuencias catastróficas.




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